Enfoque Informativo
Bajo la indolencia de las autoridades y en pleno sol , los adultos mayores hacen largas filas para hacer los retiros de los cajeros.
No hay suficiente personal, ni cajeros y para colmo tienen problemas con el sistema mientras que los beneficiarios del programa tienen que esperar más de 3,4 y 5 horas parados hasta que se dignan en atenderlos.
La mayor parte de los adultos mayores acuden llevan sillas de ruedas, bastones y andaderas, sin que nadie se preocupe por ellos.
Largas filas se observan en el banco del Bienestar del puerto de Acapulco, donde los adultos mayores acuden a cobrar su pensión.
En la sucursal Hornos, del primer cuadro de la ciudad, las personas hacen dos filas, una para pasar a retirar del cajero automático y otra para pasar a la caja.
En ambos casos las filas son largas y no hay donde puedan sentarse o refugiarse de los rayos del sol.
Para ser de las primeras personas en pasar deben arribar a temprana hora.
Los adultos mayores con dificultades asisten las oficinas del Bienestar, pero se llevan la sorpresa que los tienen en el sol, y sin lugar donde sentarse, lo que ha provocado inconformidades.
Por esa razón, exigen al gobierno federal que tenga más personal, porque escasamente tienen dos o tres, pero no dan respuesta a la inquietud de los adultos mayores.
Aunado a esto, constantemente presentan problemas de conexión, y tarda varias horas para restablecer, mientras que los beneficiarios.
Mientras los servidores de la nacional, no tienen ningún adiestramiento para el trato para este sector por lo tanto no tienen control sobre la capacitación.