Enfoque Informativo
La tercera sala penal del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de la Ciudad de México determinó reducir la condena por el delito de homicidio a Juan Mario Velarde, director responsable de obra (DRO) del Colegio Enrique, la cual pasó de 208 a 70 años de prisión.
La sanción de más de dos décadas fue “incorrectamente” determinada por el Tribunal de Enjuiciamiento el 14 julio de 2021, determinó la revisión que realizó el magistrado tras la apelación de la pena que interpuso la defensa del sentenciado.
“Lo anterior es porque aplicó inadecuadamente el párrafo primero del Artículo 78 del Código Penal para el Distrito Federal, hoy Ciudad de México, que establece: (…) En caso de concurso ideal, se impondrá la sanción correspondiente al delito que merezca la mayor determinación”, se lee en la resolución hecha por la tercera sala del TSJ.
A Juan Mario Velarde le fue impuesta una pena de 208 años debido a que los jueces le dictaron ocho años de prisión por cada una de las 26 víctimas que perdieron la vida tras el colapso del Colegio Rébsamen en el sismo de septiembre de 2017.
Sin embargo, el magistrado argumentó que los representantes del Tribunal de Enjuiciamiento debieron de haber tomado la pena mínima que prevé el Código Penal, por el delito de homicidio, que es de cuatro años, excepto por una de las víctimas, por la cual sí se le debe de condenar por ocho años.
Al realizar la operación aritmética resultan 108 años de prisión.
Sin embargo, el togado indicó que en el artículo 33 del Código Penal se señala que “la prisión consiste en la privación de la libertad personal. Su duración no será menor de tres meses ni mayor de setenta años”.
“En consecuencia, la pena que deberá compurgar Juan Mario Velarde Gámez por el delito de homicidio diversos 26 (…) es de 70 años de prisión preventiva sufrida como medida cautelar, al no ser factible rebasar el máximo de la duración de pena de prisión establecido por la ley”, quedó asentado en la resolución.
De acuerdo a la indagatoria, Juan Velarde Gámez fue la persona que otorgó la responsiva de la constancia de seguridad estructural, un documento clave para el funcionamiento del Colegio