Enfoque Informativo

Varios científicos ya tienen copias exactas de órganos de sus pacientes en sus computadoras, donde pueden predecir comportamientos extraños, prevenir enfermedades y brindar el mejor tratamiento existente

Por un momento imaginemos que nuestro médico de cabecera tiene una copia digital de cada uno de nosotros almacenada en su computadora. Ese gemelo digital funciona como un voluntario que siempre está ahí para nosotros: ante cualquier accidente o enfermedad, los expertos prueban primero el tratamiento en él. Este clon puede respirar y caminar, pero también romperse una pierna o desarrollar enfermedades cardiovasculares.

Aunque suena a ciencia ficción, investigadores de todo el mundo ya trabajan en esa tecnología y son varios los ejemplos que se han alcanzado en los últimos años gracias a la inteligencia artificial y a las supercomputadoras que procesan millones de datos en segundos.

O el proyecto que encaró como propio el doctor Steve Levin cuando su hija nació con una cardiopatía congénita y decidió recrear su corazón en realidad virtual. Una tecnología que ahora intenta ayudar a niños con enfermedades cardíacas raras y difíciles de tratar. Levin creó el proyecto Living Heart de la empresa Dassault, que ha logrado crear un modelo virtual preciso del corazón humano que se puede probar y analizar, lo que permite a los cirujanos representar una serie de escenarios hipotéticos para el órgano, utilizando diversos procedimientos y dispositivos médicos.

Estos gemelos digitales son prototipos computacionales extremadamente detallados que simulan las características y el comportamiento de su equivalente físico y que pueden aplicarse en una gran variedad de campos y situaciones. Los gemelos digitales (o digital twins) son una de las tendencias tecnologías más llamativas de los últimos años ya que prometen tener una gran variedad de aplicaciones.

Gracias al internet de las cosas (IoT), estas copias están vinculadas al mundo físico y ofrecen información del mismo en tiempo real. De hecho, existen ya grandes corporaciones como Digital Twin Consortium de Estados Unidos, que aplican esta tecnología a distintas áreas como la aeroespacial y defensa, recursos naturales, construcción y ciudades inteligentes, manufacturing o proceso de fabricación y el cuidado de la salud.

El ejemplo más reciente es el que tiene lugar en Barcelona, entre los muros de una capilla del siglo XIX, donde un corazón virtual, con sus 100 millones de parches de células simuladas, es un gemelo digital completamente funcional de la anatomía humana, que bombea a un ritmo pausado mientras prueba distintos tratamientos, desde medicamentos hasta implantes. Un gemelo digital no es un avatar en el metaverso, tampoco una clonación genética. Un gemelo digital es una representación informática de la realidad y su contexto. Así se puede simular cómo va a reaccionar y tomar decisiones.

Este gemelo digital pulsa por ejemplo, dentro de MareNostrum, una supercomputadora utilizada por científicos para simular características del mundo real al más mínimo detalle, desde cómo se mueve el corazón hasta los átomos cargados que entran y salen de sus células. Su funcionamiento digital está comenzando a ayudar a los médicos a predecir cómo responderá un corazón verdadero de un paciente a un tratamiento particular. Los expertos que están involucrados en estos proyectos piensan que la actual medicina está atrasada y que este esfuerzo mundial para crear células, tejidos y órganos virtuales es algo revolucionario de la medicina moderna.

Actualmente, los médicos tratan de descubrir cuál es el mejor tratamiento para sus pacientes evaluando ensayos clínicos anteriores en sujetos que son un poco como sus pacientes presentes, en circunstancias similares pero no idénticas. Sin embargo, ya los médicos pueden usar gemelos digitales, que ven el intercambio de datos y conocimientos entre un ser humano real y virtual, para predecir mejor lo que les espera a los pacientes, ayudando a lo que es en su mayoría una talla única. -todo enfoque evoluciona hacia uno verdaderamente predictivo y personalizado.

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