Por Eduardo Salgado
Se estiman perdidas superiores a los diez millones pesos, las que se dan cada que grupo de manifestantes salen a la zona turística como la Costera para bloquear sin que ninguna autoridad haga algo al respecto, ya se tiene que aplicar la ley.
Así lo externó Pascual Romero, presidente del Grupo Empresarial Guerrero, quien lamentó que el gobierno en sus tres niveles brillen por su ausencia, cuando la economía de Acapulco y los terceros terminan siendo rehenes de grupos minoritarios, que sin consideración alguna bloquean la libre circulación.
Romero recalcó que las empresas locales, continúan con una fuerte crisis económica generada desde el huracán Otis, que se complicó con el huracán John y que termina por colapsar con los bloqueos.
Cuestionó la falta de capacidad de los gobernantes, al hacer caso omiso del clamor acapulqueño que exige aplicar la ley en contra de quienes entorpecen la vida diaria de la ciudad.
Llamó a la conciencia de los inconformes, ya que recalcaron que al final el día los más afectados también son ellos, principalmente al tratarse de prestadores de servicios turísticos los que bloquearon por varias horas la avenida costera de Acapulco en la Diana.
Puntualizó que tanto los bloqueos, como la inseguridad latente y violencia que diariamente se presenta en el puerto, representan el acabose de esta ciudad, con lo que se diluye el animo de que la temporada turística de fin de año, será de beneficio para todos.
