Enfoque Informativo
La Federación Internacional de Ajedrez (FIDE, por sus siglas en francés) indicó que la participación de mujeres transgénero dependerá de un análisis de casos individuales que podría tomar hasta dos años
La principal federación mundial de ajedrez dictaminó que las mujeres transgénero no pueden competir en sus eventos oficiales para mujeres hasta que sus funcionarios realicen una evaluación del cambio de género.
La decisión de la Federación Internacional de Ajedrez (FIDE, por sus siglas en francés) con sede en Lausana, Suiza, fue publicada el lunes y ha generado críticas de grupos de defensa y partidarios de los derechos de las personas transgénero.
La FIDE dijo que tanto ella como sus federaciones miembros han recibido cada vez más solicitudes de reconocimiento de jugadoras que se identifican como transgénero, y que la participación de mujeres transgénero dependerá de un análisis de casos individuales que podría tomar hasta dos años.
“El cambio de género es un cambio que tiene un impacto significativo en el estatus de un jugador y su elegibilidad futura para los torneos, por lo cual sólo se puede realizar si se proporciona una prueba relevante del cambio”, indicó la federación.
“En caso de que el género se cambiara de masculino a femenino, el jugador no tiene derecho a participar en los eventos oficiales de la FIDE para mujeres hasta que se tome una decisión adicional de la FIDE”, añadió.
Los poseedores de títulos de mujeres que cambien su género a masculino verán esos títulos “abolidos”, advirtió la federación, al tiempo que ofrece la posibilidad de una restitución “si la persona vuelve a cambiar el género a mujer”.
“Si un jugador ha cambiado el género de hombre a mujer, todos los títulos anteriores siguen siendo elegibles”, añadió la federación.
Reconoció que tales preguntas con respecto a los jugadores transgénero eran un “tema en evolución para el ajedrez” y que “es posible que más adelante deba crearse una política adicional con base en la evidencia de una investigación”.
De momento no ha habido respuesta a los mensajes de correos electrónicos enviados a las autoridades de la federación ni a las llamadas telefónicas realizadas a la sede de la federación en Suiza en busca de más comentarios.