Carlos Murueta Reyes

En unos cuantos días, Evelyn Salgado Pineda tomará protesta como gobernadora del estado de Guerrero. Inicia así el camino tan esperado por la población, la oportunidad de construir, posiblemente, la mejor administración de todos los tiempos y la primera en respetar la paridad de género. A lo largo de su campaña y posterior reconocimiento como gobernadora,  miles de ciudadanos participaron con propuestas a través de foros de consulta. Fueron tantas las aportaciones en los diversos temas que se cuenta con una guía nutrida y bien consolidada para la nueva administración, sobre todo al momento de realizar cambios en el ámbito jurídico, base de toda transformación social.

Evelyn Salgado Pineda, como mujer joven, ha demostrado desde su primera intervención como candidata,  en el parque de la colonia La Laja, que tiene el mismo talento que su padre Félix Salgado para expresarse delante de las masas, comunicando claramente sus planteamientos. Esto fue en realidad una grata sorpresa para quienes asistimos y escuchamos con atención su mensaje. Días después, varios colegios y barras de abogados decidimos invitarla a un foro jurídico, donde atendió diversas propuestas en un entorno más académico, rodeada de profesionistas y representantes de organizaciones civiles, con temas más complejos. Sin embargo, para muchos se trató de una de las mejores participaciones en toda su campaña, pues demostró su inteligencia, madurez, dominio del lenguaje jurídico y enorme capacidad política. Quedamos entonces convencidos de que cumpliría un excelente papel como gobernadora.

El estado de Guerrero supone un reto enorme en todo sentido. Existen graves problemas de pobreza, inseguridad y crimen organizado; asimismo, se debe hacer frente a otras necesidades, como la caída del turismo y los movimientos de autodefensa o policías comunitarias. Sin embargo, Evelyn Salgado Pineda no está sola. Cuenta con la asesoría y experiencia de Félix Salgado Macedonio, así como el apoyo del pueblo y de numerosas organizaciones sociales en todo el estado. En este sentido, tiene la fuerza suficiente para cumplir sus propósitos e implementar las reformas más adecuadas para una entidad como la nuestra.

Por ello, más allá de las dificultades y los desafíos por venir, confiamos en que la preparación, la inteligencia y dedicación de nuestra gobernadora llevará con éxito la cuarta transformación a Guerrero.

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