Enfoque Informativo
El gobierno dejará de cobrar los 5.49 pesos que los contribuyentes deberían pagar por concepto de Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS)
Desde este sábado 5 de marzo y hasta el viernes 11, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) dará un estímulo fiscal del 100 por ciento a la gasolina Magna y el Diésel, por lo que el gobierno dejará de cobrar los 5.49 pesos que los contribuyentes deberían pagar por concepto de Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) en el primer caso, mientras que por el diésel será de 6.03 pesos.
Es preciso recordar que el precio de la gasolina se determina por el valor internacional del petróleo y el tipo de cambio del dólar, por lo que de un día a otro puede tener notables variaciones. Adicionalmente, en México también se paga el impuesto denominado IEPS, que surgió desde 1980 y ha sufrido diversas modificaciones a través de los años.
Esta medida obedece al decreto publicado en la edición vespertina del Diario Oficial de la Federación en que se otorgará este estimulo fiscal complementario a los combustibles cuando estos alcancen el 100 por ciento. Para ello, se debe aclarar que es la propia Secretaría de Hacienda la que determina dicho porcentaje.
En el caso de la gasolina Premium, esta semana la SHCP determinó que el estímulo fiscal sería de 97.14 por ciento, lo que implica que los automovilistas deberán pagar 13 centavos de IEPS por cada litro adquirido del combustible.
De acuerdo con la Comisión Reguladora de Energía (CRE), actualmente el precio promedio de la gasolina regular (tipo Magna) es de 21.9 pesos, para la Premium es de 23.9 mientras que para el Diésel se ubica en 22.8 pesos por litro.
Estos estímulos pueden parecer menores en primera instancia, pero se debe resaltar que previamente se encontraban en 99.10 para la Magna, 77.46 para la Premium y 78.64 para el Diésel. Sobre este último, se debe recordar que la mayor parte del traslado de productos alimenticios en nuestro país se hace a través de la vía terrestre, en camiones que utilizan el diésel.
Esta medida pretende reducir el impacto en el bolsillo de los mexicanos que genera el aumento en el precio de los combustibles, pues el valor de la gasolina está asociado al incremento de otros productos y servicios. México enfrenta un problema de inflación superior al 7%, y debido al conflicto internacional por la invasión rusa en Ucrania, el precio del petróleo ha subido considerablemente, generando entre las economías una presión inflacionaria adicional a la crisis por la pandemia de coronavirus.
