En los últimos años los directores mexicanos cada vez destacan más en Hollywood, no por nada Alejandro González Iñárritu, Guillermo del Toro y Alfonso Cuarón han sido reconocidos con uno o varios Oscar, pero antes de ser reconocidos con tales premios, empezaron su carrera con algunos proyectos, este es el caso de Alfonso Cuarón con Harry Potter.
Sin duda, Harry Potter es una de las sagas más populares en el cine y para muchos mexicanos fue una gran sorpresa cuando Alfonso Cuarón fue quien dirigió la tercera parte: Harry Potter y el prisionero de Azkaban, pero que Cuarón hubiera aceptado dirigir el filme es todo gracias a Guillermo del Toro.
Alfonso Cuarón y Guillermo del Toro son grandes amigos, se sabe que en diferentes ocasiones se han pedido consejos y ayudado para sus películas, pero hace unos años el director de El laberinto del fauno fue fundamental para que Cuarón dirigiera la tercera película del mago más famoso.
A más de diez años del estreno de Harry Potter y el prisionero de Azkaban, Alfonso Cuarón recordó en una entrevista con Vanity Fair cómo fue que gracias a su amigo Guillermo del Toro tomó la decisión de dirigir la película.
Hablé con Guillermo, como siempre lo hago, y él me preguntó ‘¿En qué estás? ¿Hay proyectos en marcha?’, le dije: ‘Estoy postulado a Harry Potter ¿Puedes creerlo?’ e incluso me reí de eso. No había leído los libros ni visto las películas. Y después de eso me miro enojado”.
El director dijo que Guillermo del Toro lo llamó “arrogante” y lo mandó a comprar los libros para que estuviera al tanto de lo qué trataba la saga.
“Me dijo: ‘Maldito flaco ¿Has leído los libros?’ y le respondí: ‘No, no he leído los libros’. Él me dijo: ‘Maldito flaco, eres un bastardo arrogante. Vas a ir ahora a las librerías, vas a tomar los libros, los vas a leer y me vas a llamar de inmediato’. Cuando te habla así, bueno, tienes que ir a la librería”.
Finalmente, Alfonso Cuarón detalló que este momento le dio una lección por lo que al aceptar la propuesta de dirigir la película tuvo la convicción de hacerla a su manera, pero respetando todos los detalles que hacían especial a Harry Potter.
“En ese momento el cuarto libro acababa de salir. Leí los dos primeros, y estaba a la mitad del tercero, que era el que me habían ofrecido. Lo llamé y le dije: ‘Bueno, el material es realmente genial’. Él me dijo: ‘Bueno, ¿ves maldito?’. Como cineasta, era casi como una lección de humildad, de decir ¿Cómo voy a hacerlo a mi modo, pero al mismo tiempo respetando lo que ha sido amado en esas dos películas?”.