Enfoque Informativo
La ciudad de Acapulco, aún recuperándose de los huracanes Otis (2023) y John (2024), enfrenta nuevamente los embates de la naturaleza con la tormenta tropical Dalila.
Este viernes, fuertes lluvias, ráfagas de viento y oleaje intenso han causado afectaciones en zonas como la Zona Diamante, el fraccionamiento Las Playas, Caleta, y las playas Papagayo y El Morro.
Formación y trayectoria de Dalila
Según el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), Dalila evolucionó de la Depresión Tropical Cuatro-E y se formó a unos 315 kilómetros al sur de Zihuatanejo, Guerrero. Interactuando con un canal de baja presión, ha provocado lluvias intensas en Guerrero, Oaxaca, Michoacán y Chiapas, con vientos de 20 a 30 km/h, rachas de hasta 60 km/h en Jalisco y Colima, y oleaje de 4.5 a 5.5 metros en Guerrero y Oaxaca. En Acapulco, el puerto fue cerrado a la navegación debido al oleaje y riesgos costeros.
Impacto en Acapulco
Las lluvias y vientos han generado encharcamientos significativos en la Zona Diamante, complicando el tránsito vehicular. En Caleta, Papagayo y El Morro, el oleaje ha impactado con fuerza, mientras que las calles presentan fuertes corrientes de agua. Aunque Dalila no tocará tierra, su circulación provoca condiciones adversas. La Coordinación Estatal de Protección Civil alertó sobre riesgos de inundaciones y deslaves en áreas cercanas a cuerpos de agua y llanuras, donde el suelo está saturado por lluvias previas.
Contexto de vulnerabilidad
Acapulco sigue afectado por Otis, huracán categoría 5 que en 2023 dejó 52 fallecidos, 31 desaparecidos y daños por 39 mil millones de pesos, con el 80% de hoteles y más de 200 mil viviendas dañadas. John, en 2024, causó 23 muertes y afectó a 270 mil personas, con 40 mil viviendas inundadas. Estos eventos, junto a la ocupación de zonas de riesgo como La Poza, agravan la situación actual. El cambio climático, que ha elevado la temperatura de los océanos en 1.1 grados, intensifica ciclones como Dalila, aumentando su capacidad de generar lluvias torrenciales.
Respuesta de las autoridades
La Coordinación Nacional de Protección Civil (CNPC) activó protocolos de emergencia, recomendando seguir indicaciones oficiales, preparar planes de evacuación y evitar zonas de riesgo. La gobernadora Evelyn Salgado informó que se monitorean Acapulco, Costa Chica y Costa Grande, reforzando medidas preventivas. Se alertó sobre posibles inundaciones y deslaves, instando a no transitar por áreas anegadas o cerca de ríos como el Papagayo, desbordado durante Otis.
Impacto social y económico
Dalila llega en un momento crítico para el turismo, pilar económico de Acapulco, aún debilitado por huracanes previos. Hoteleros y comerciantes enfrentan interrupciones por las lluvias y el cierre del puerto.
Residentes de zonas como Pie de la Cuesta expresan preocupación por la cercanía del mar. Organizaciones alertan sobre la vulnerabilidad de menores, afectados por la pérdida de espacios seguros, rezago educativo e inseguridad, problemas que las lluvias podrían agravar.
Recomendaciones y perspectivas
Las autoridades instan a informarse por canales oficiales, evitar cruzar ríos y resguardarse en lugares seguros. Dalila se desplazará hacia el oeste, alejándose de México, pero sus efectos continuarán generando lluvias intensas. Acapulco, marcada por la resiliencia, enfrenta el desafío de reconstruirse, destacando la necesidad de fortalecer infraestructura, actualizar planes de contingencia y abordar el cambio climático. La comunidad permanece alerta, esperando que las afectaciones de Dalila no alcancen la magnitud de huracanes anteriores.