Eduardo Flores Salado

Gracias a la fundación Herta Fricke que cumple los sueños de menores que padecen enfermedades terminales, 14 niños con padecimientos como cáncer e insuficiencia renal conocieron el mar, por primera vez, en Acapulco. 

Los menores que provienen de Puebla y del Estado de México disfrutaron las bellezas naturales que ofrece el puerto.

Acompañados por sus padres, los niños arribaron al puerto; cabe destacar que los padecimientos de varios de ellos, se encuentran en etapa terminal.

Durante su visita a Acapulco, los niños conocieron la Isla de la Roqueta y recibieron regalos de empresarios como Jesús Zamora, quien los recibió en su restaurante y junto a los miembros de la fundación hicieron que los menores vivieran un día lleno de alegría.

Luis Manuel Salas, padre de familia de una niña de 4 años de edad con padecimiento de cáncer, dijo que la fundación Herta Fricke logra que a los niños se les olvide que están enfermos.

Asimismo, detalló que su pequeña hija fue operada de la vejiga, y que en esa primera intervención salió avante; sin embargo, después de nuevos estudios, se reveló que a su niña, aún le queda un centímetro de tumor, pero confía en Dios que todo salga bien.

Los menores regresarán a sus ciudades de origen, donde continuarán con sus tratamientos; sin embargo, tras visitar Acapulco, sus energías están renovadas para seguir con su lucha por la vida.

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