Por Guillermo Hernández Acosta
De ser una materia prima sin uso, hoy es utilizado para mejorar y elevar la producción de diferentes cadenas productivas.
La industrialización de la concha o bonote de cocotero a tenido un auge importante en los últimos años, ya que de ser un desperdicio pasó a ser materia prima para elaborar sustrato que sirve para la agricultura entre otros usos.
Rosario Enriquez Morán directora de “Organia de México” que mantiene en operaciones una planta dónde se recibe todo el bonote o concha de cocotero, señaló que está actividad es muy noble, ya que genera importantes fuentes de empleo en una industria que antes no era tomada en cuenta, sin embargo el procesamiento de la materia prima reditúa en grandes beneficios.
Unos de los beneficios de la elaboración o industrialización de la concha de coco va directamente ligado al campo, ya que la fibra del coco ayuda al crecimiento y asentamiento de las raíces manteniendo constante humedad y los nutrientes que las plantas necesitan para lograr una producción de calidad.
Enriquez Morán, agregó que la planta a su cargo ubicada en los límites de los municipios de Tecpan de Galeana y Benito Juárez, opera desde hace varios años, empresa que recibe toda la concha de coco que antes se desechaba y que al aumentar la demanda del coco jimado cómo fruta se le ha dado un valor agregado con muchos usos.
Organia de México, refirió Rosario Enriquez, es una empresa fincada con un alto compromiso de cuidar la ecología tomando como base la necesidad que existe en otros estados de la República por utilizar este producto para mejorar las cadenas productivas de dónde dependen cientos de familias que trabajan en el campo.
