Enfoque Informativo
Las cámaras de infracciones captaron a un inusual “conductor” en la región de Trnava, Eslovaquia. La excusa del dueño del auto
Eslovaquia fue el escenario de un inusual episodio que parece sacado de una película de comedia, pero que realmente ocurrió. Un perro fue multado por manejar un auto a exceso de velocidad en plena vía pública.
Este extraño incidente tuvo lugar en la región de Trnava, donde las cámaras de infracciones captaron imágenes sorprendentes: un perro al volante de un vehículo que superaba los límites de velocidad permitidos. Aunque pareciera ser una noticia falsa, las pruebas visuales son contundentes y dejaron a muchos incrédulos.
Las imágenes muestran al canino aparentemente al mando del auto, lo que generó asombro y risas en las redes sociales. Sin embargo, la realidad detrás de este curioso suceso es más compleja de lo que parece.
La patrulla de la policía local no pudo evitar detener el vehículo en la localidad de Sterusy, donde se constató que circulaba a 10 km/h por encima del límite de velocidad en la vía. El propietario del auto, un hombre de 31 años, explicó que su perro había dado un salto inesperado sobre él, provocando esta situación inusual. No obstante, las fotos obtenidas contradicen esta versión.
Finalmente, el dueño del auto recibió una multa, aunque aún no está claro si esta se debió al exceso de velocidad o a la incorrecta sujeción del perro en los asientos traseros. La Policía aclaró este incidente en una publicación en Facebook, recordando que cualquier animal, sin importar su tamaño, puede poner en peligro la vida de un conductor y sus pasajeros si no viaja debidamente asegurado.
Según la legislación eslovaca, las mascotas deben viajar en el asiento trasero del vehículo, preferiblemente con un arnés de seguridad o en una jaula de transporte homologada. Estas medidas no solo garantizan la seguridad del animal, sino también la de los ocupantes del vehículo en caso de un accidente.
Cabe destacar que está prohibido transportar animales en la parte delantera del vehículo, en la caja de una camioneta o con la cabeza asomada por la ventana. En el caso de animales potencialmente peligrosos, es obligatorio que vayan atados con un bozal adecuado y en una jaula de transporte homologada.
