Enfoque Informativo
Denuncia Irma Lorena Zamudio Gómez, negligencia médica por parte de la veterinaria Wild Pets ubicada en el Zócalo, por la muerte de su mascota gatuna, señala a la veterinaria por falsificar firmas y huir de su responsabilidad por el deceso de “Bombón”, que pereció días después de haber sido atendido en ese centro médico.
El 25 de junio, “Bombón”, un gato raza persa de tres años de edad, ingresó de urgencia a dicha veterinaria ubicada sobre la avenida Costera de Acapulco frente al Malecón el día 25 de junio cuyo responsable es el Médico Veterinario Zootecnista Alejandro Brambila, de cédula profesional 9954763.
No obstante, al no estar presente el médico, la atención del gato estuvo a cargo de la veterinaria Monserrat Berenice Hernández, quien en un primer momento solicitó la realización de un ultrasonido para revisar la condición del gato y hacerle un sondeo, por la retención de orina.
Sin embargo no hubo sonda como tal y el procedimiento fue con jeringa, registrado en fotografías enviadas a la médico a Lorena Zamudio, vía Whatsapp.
Posteriormente y tras varias horas en observación, Irma Lorena decide ir a la veterinaria para llevar a Bombón a casa y a la hora de recogerlo, el gato orinó una gran cantidad de sangre, lo que la asombró de inmediato, sin embargo la veterinaria le señaló que eso “era normal” tras el procedimiento que se le aplicó. Al día siguiente, el gatito falleció.
Por ello y al considerar que la muerte del gato fue por negligencia, Zamudio interpuso una denuncia ante la Dirección de Ecología del Municipio municipal, con fecha de 31 de julio de julio de 2024, folio DC/062/24, dónde anexa además denuncia escrita a puño y letra, fotografías, análisis, recibos de honorarios y recetas médicas.
Posteriormente, contó la denunciante, Ecología realiza una supervisión del la clínica veterinaria y revisión de cédulas profesionales, no encontrando anomalía alguna pero en simultáneo, la médico veterinario Monserrat Berenice ingresa a la misma dirección de Ecología una respuesta a la denuncia presentada en su contra el día 13 de agosto.
En ella, se presenta una narrativa de los hechos asentada en trece hojas, dónde además adjuntó capturas de conversaciones de WhatsApp, la carta responsiva firmada por la denunciante sobre la intervención al gato y por último, la pregunta hoja de Alta Voluntaria “firmada por puño y letra de Irma Lorena”.
De este último, Zamudio Goetz aseveró que jamás firmó una alta voluntaria y que la firma fue falsificada y dijo, que este delito puede ser avalado por un grafólogo.
De igual forma, la denuncia escaló a la Fiscalía General del Estado, en el ministerio público de Tabares y a la Procuraduría de Protección Ambiental del Estado de Guerrero (PROPAEG), con fecha del 19 de agosto del presente año y asentada con el folio PROPAEG/DNPA/085/2024.
Aunque no especificó fechas, Irma Lorena aseguró que tras la denuncia, personal de la Fiscalía acudió a una nueva supervisión ha mencionado centro veterinario, donde ella estuvo presente.
En ese punto, Zamudio se dice sorprendida al percatar que la clínica sufrió cambios en sus instalaciones, con la colocación de un portón y varias cámaras de seguridad que aseguró, no había cuando Bombón ingreso para ser atendido, “¿A qué le temen entonces?”, cuestionó.
Los peritos de la fiscalía fueron recibidos por el abogado Guaxzon Chávez Hernández, quien se ostenta como la parte defensora de la veterinaria y a quien Irma Lorena describe de grosero, déspota y doble cara, “porque si tú ves su portal de Facebook, se presenta como un abogado defensor del bienestar animal”.
Contó la doctora Irma Lorena, que en el recorrido realizado, llevan a los peritos a un espacio donde supuestamente era el quirófano y le fue aplicado el procedimiento a Bombón, situación que negó de inmediato, ya que en ese lugar la mascota no fue atendida, de acuerdo a fotografías.
Ante ello, aseguró que el abogado se molestó y la corrió de las instalaciones, por lo que ella decidió salir de la clínica y esperar a los peritos en la parte de afuera.
En el contexto de la entrevista a este medio y posterior a la narrativa antes mencionada, la doctora Irma Lorena aseguró que el caso no ha tenido avances. Sin embargo se mantiene atenta sobre su denuncia.
No obstante pidió el espacio en este medio de comunicación para exhibir su caso y alertar a toda la población acapulqueña para que evite llevar a sus mascotas “Wild Pets”.
Aseveró además, que al contar su caso a varios amigos y conocidos, el caso fue haciendo eco y logró contactar al menos a cinco personas que, también manifestaron haber tenido una mala experiencia con esa veterinaria por malas prácticas y malos diagnósticos médicos.
Zamudio Goetz puntualizó que no quitará el dedo del renglón hasta que haya justicia para “Bombón”, quedando así un precedente contra quienes ostentan ser profesionales y provocan muerte y sufrimiento a los animalitos.
Cabe destacar que la propia clínica veterinaria en su portal de Facebook, cuenta con al menos 3 calificaciones negativas de usuarios, una de ellas la propietaria de un tlacuache.
Otras dos evaluaciones más aseguran que en la clínica dieron diagnósticos erróneos.