Por Guillermo Hernández Acosta
El río se “comió” cientos de hectáreas de huertas que ahora son parte del río.
Campesinos que tienen sus huertas en el Cerrito en dirección al punto conocido como Espinalillo, además de perder las cosechas de maíz, plátano, coco y ajonjolí perdieron también grandes superficies de terreno que ahora son parte del río Tecpan.
En un recorrido por la zona al ingresar al camino real se puede observar los daños y lo que antes era el camino de saca cosechas 200 metros de este fueron “comidos” por la corriente de agua desapareciendo en su totalidad los linderos de las huertas.
Audias Brito Quintero, productor de plátano dijo que toda la cosecha se perdió, además de plantaciones de ajonjolí y maíz quedaron sepultados bajo un metro de tierra que arrastró la corriente del río.
Dijo que ni el paso de las tormentas Ingrid y Manuel causaron tanto daño como lo hizo John ya que se puede apreciar el paso destructivo de la corriente de agua que derribó y sepultó palmeras, árboles de mango, sauces y parotas.
Se pueden observar también el nivel de tierra que dejó la corriente de agua, puertas de fierro casi sepultadas en su totalidad, cocos y mazorcas de maíz regados por la tierra.
Así mismo en la dirección contraria en el camino que conduce a la planta tratadora de aguas residuales que nunca funcionó, la reciente construcción de la barda perimetral en la parte frontal del panteón colapsó cayendo sobre una tumba.