El 27 de enero la casa de subastas Sotheby’s ofertará el cuadro de Sandro Botticelli titulado “The Man of Sorrows”. La obra ha formado parte de la colección privada de una familia, que se mantiene en el anonimato, desde el siglo XIX. Si de por sí la pieza en sí ya causaba interés, un nuevo descubrimiento lo vuelve más aún más deseado.
El retrato de Cristo tiene un trasfondo… uno de verdad, pues una imagen infrarroja muestra que antes de ser “The Man of Sorrows”, Botticelli había iniciado en ese mismo lienzo lo que iba a ser un retrato de una Madonna cargando a Cristo de bebé.
Chris Apostle, vicepresidente de Sotheby’s y director del área “Old Masters” explicó al medio “The Art Newspaper” que la imagen permitió ver los trazos de la Madonna que arruya al bebé Cristo, de quien se pueden distinguir con claridad sus facciones (ojos, nariz y boca), si se voltea el cuadro.
Apostle explicó que durante el Renacimiento los lienzos eran considerados un lujo, por lo que se evitaba desperdiciarlos. Así que si se llegaba a abortar una pintura, no se desechaban, así que pareciera que ese fue el motivo por el que Botticelli volteó el lienzo y pintó sobre él una imagen que “refleja la angustia religiosa -de la época- cuando las predicciones del apocalipsis y las esperanzas de salvación personal habían alcanzado un alto nivel de intensidad”, según reporta el medio.

COMPARTIR