Por: Juan José Romero
Ante el índice tan alto de niños deportados, el Gobierno del Estado puso en marcha el programa “Regreso a casa”
Alrededor de 3 mil niños migrantes deportados enfrentan esta situación en las ciudades fronterizas de estados como Baja California o Tamaulipas, informó la Secretaria del Migrante y Asuntos Internacionales del gobierno del estado, Silvia Rivera Carbajal.
La funcionaria estatal reconoció la gravedad que conlleva, el asunto de los niños migrantes guerrerenses deportados que se encuentran en albergues de los estados de la frontera norte, es un problema dijo que el gobierno de Guerrero ha tenido abandonado desde hace años, sobre todo porque entre un 15 y 20 por ciento de los niños migrantes van solos, no van acompañados por sus padres o algún familiar.
“Ya tiene varios años que el gobierno de Guerrero ha tenido abandonado este asunto, porque no es nuevo el que niños deportados queden en la frontera, de los cuales entre el 15 y 20 por ciento van solos, por lo que sí es un problema, ya que se quedan en albergues hasta que los reclama un familiar porque muchas veces sus padres están en los Estados Unidos”, indicó.
Refirió, que ante el índice tan alto de niños deportados, el gobierno del estado puso en marcha el programa “Regreso a casa” que ya comenzó a aplicarse y se entablaron convenios con líneas de autotransportes que hacen viajes a Guerrero para regresar a los niños, todo en coordinación con el DIF Nacional y el estatal.
Señaló que debido a lo delicado que es el traslado de estos niños, sostuvo que todo se hace de manera legal a través del DIF Guerrero en tanto que la Secretaría del Migrante y Asuntos Internacionales cubre el pasaje y al llegar al estado se entregan a sus familiares.
Los menores tiene una edad entre siete y 17 años que están en esos albergues fronterizos, de los cuales aproximadamente un 20 por ciento no se quieren regresar a Guerrero, porque son adolescentes y sus padres quieren intentar cruzar otra vez a los Estados Unidos de Norteamérica.
Rivera Carbajal, mencionó que el número de niños deportados del vecino país del norte varía, es muy fluctuante, pero desde el 2015 Guerrero ocupaba el primer lugar.
Comentó que hasta el momento, el gobierno del estado ha apoyado para el regreso de alrededor de un 10 por ciento de niños acompañados de sus padres, ya que trasladar a los que se encuentran solos en esos albergues de ciudades fronterizas es un proceso mucho más complicado que requiere de un trato especial en el que ya interviene la Procuraduría de la Defensa del Menor y el DIF Guerrero, indicó.