Por Alejandro Ortiz
Esta semana otros dos indígenas de Xochitempa, también territorio del CIPOG-EZ fueron asesinados en Chilapa
Cuando regresaban de los campos de cultivo de Sinaloa, tres campesinos indígenas de la localidad de Zacapexco, municipio de Chilapa, desaparecieron en medio de la ola de violencia contra poblaciones indígenas incorporadas al Consejo Indígena y Popular del Estado de Guerrero-Emiliano Zapata (Cipog-EZ).
Fue el Cipog-EZ, quien denunció a través de sus redes sociales las desapariciones de Nicolás Rodríguez Díaz, Ángel Villalba Salvador y Marcelino Hernández Tecorral, todos originarios de Zacapexco.
Los tres campesinos de origen indígena, habrían sido desaparecidos en la cabecera municipal de Chilapa cuando esperaban transporte local para dirigirse hacia su localidad.
La información del Cipog-EZ apunta a que el día de ayer, los desaparecidos llegaron a Chilpancingo tras la jornada de cosecha en los campos de Sonora y posteriormente se trasladaron a la cabecera municipal de Chilapa de Álvarez.
«La última información que se tiene de ellos es que se encontraban esperando taxi para llegar a la comunidad de Zacapexco, nunca llegaron, se ha perdido toda comunicación con ellos».
Este hecho de violencia, se suma al asesinato de otros dos campesinos originarios de la localidad indígena de Xochitempa, Chilapa, también integrada al Cipog-EZ, ocurridos el domingo pasado en una gasolinera de Chilapa.
El Cipog-EZ ha denunciado que el gobierno municipal de Chilapa, y sus policías municipales, operan en contubernio con el grupo delictivos de Los Ardillos, aportando información sobre la llegada de pobladores de localidades de su sistema comunitario, para que atenten en su contra.