Por: Juan José Romero

El acuerdo de la dirigencia nacional es tratar este asunto, pero únicamente con las autoridades que se comprometieron a darle seguimiento al caso

Un tiempo prudente para dar resultados, es lo que las autoridades en materia de procuración de justicia pidieron en el caso de la muerte que tuvieron el dirigente de Antorcha Campesina en Chilpancingo, Conrado Hernández Domínguez, su esposa Mercedes Martínez Martínez y su pequeño hijo, sobre la carretera México–Acapulco, en las inmediaciones del punto conocido como Agua de Obispo.

Por lo anterior, el dirigente de Antorcha Campesina, en el estado, José Juan Bautista Hernández, dijo estar imposibilitado para poder proporcionar mayor información sobre el caso.

En este sentido, mencionó que el acuerdo de la dirigencia nacional es tratar este asunto, pero únicamente con las autoridades que se comprometieron a darle seguimiento al caso y recordó que ese convenio al que llegaron fue hace dos meses, plazo que está a punto de cumplirse.

“Hay un tiempo prudente que las autoridades solicitaron y nosotros estamos esperando respetuosamente que ese tiempo se cumpla”, señaló el líder campesino.

Ante la insistente pregunta de los reporteros, el dirigente estatal de Antorcha Campesina dijo desconocer que la Fiscalía General del Estado tiene alguna pista o sigue alguna línea de investigación: “estamos en espera de que volvamos a platicar y espero que sea pronto”.

No obstante, puntualizó que las autoridades tendrán que dar avances reales “en el momento en que nos vayamos a ver”.

Sin abundar más acerca de este caso, Bautista Hernández, reconoció que el asesinato del dirigente de Antorcha Campesina en Chilpancingo y su familia afectó a los guerrerenses en general, porque el problema sigue y se hizo daño a seres inocentes que no tienen nada que ver con actividades ilícitas.

Cabe recordar que la tarde del 12 de abril de este año, que el dirigente de Antrocha Campesina en Chilpancingo, Conrado Hernández Domínguez, su esposa Mercedes Martínez Martínez y su pequeño hijo, murieron en un aparente accidente automovilístico, sobre la carretera México–Acapulco, en las inmediaciones de Agua de Obispo, al sur de la capital del estado.

La dirigencia estatal de esta organización informó en su momento que antes, Conrado Hernández, su esposa e hijo habían participado en una reunión con el fin de lograr la liberación de una persona que había sido detenida por la Policía Comunitaria de Petaquillas, pero a eso de las cuatro de la tarde se reportó que cerca de Agua de Obispo, un vehículo había caído a un barranco.

En este sentido, el mismo dirigente social, denunció que una de las inconsistencias del caso es que los cuerpos de rescate y las ambulancias tardaron no menos de cinco horas al lugar de los hechos, a pesar de que se les notificó casi de inmediato.

Asimismo, denunció en su momento que de acuerdo a las primeras pesquisas, los cuerpos del dirigente antorchista y su esposa presentaban huellas de haber sido golpeados.

Todo esto fue denunciado por la dirigencia de Antorcha Campesina tras una multitudinaria marcha de protesta que realizó días después de estos lamentables hechos, refirió.